Café sensible: En el distrito de Renacimiento, provincia de Chiriquí, en una remota zona cafetalera de Panamá , fronteriza con Costa Rica, un grupo de mujeres trabaja en la producción de “café sensible”, con variedades de café tolerantes y resilientes al cambio climático y a la roya, como Obata, Tupi Marsellesa, Catuai SH3, Iapar, y adecuando sus fincas para que haya un equilibrio con los ecosistemas naturales, e insertar nuevas prácticas sostenibles.
Renacimiento, es una zona de gran altura y con un microclima templado ideal para la producción de café de calidad, una de sus principales actividades económicas.
Fue en un encuentro internacional con mujeres de la industria cafetalera que supieron de esta nueva tendencia de equilibrar la producción de café con los ecosistemas naturales y su impacto en el ambiente, calidad de vida y seguridad alimentaria, y que había mujeres en otros países que estaban organizadas y trajeron la idea.
También reforestan para aumentar el bosque con especies que mejoren los suelos y así abastecer las cuencas hídricas, y utilizan sistemas agroforestales dentro de las parcelas de café, lo cual les permite el menor uso posible de químicos para evitar el deterioro del suelo; y la utilización de abonos orgánicos.